10 cosas a destacar de un viaje a California

Napa Valley es un espectáculo En más de una ocasión, mientras me documentaba para el viaje, leí la frase que Napa Valley era como un Disneyland para adultos (yo añadiría para adultos ricos, muy ricos). Napa Valley es una carretera y son centenares de bodegas, cada cual más grande, cada cual más lujosa. Es como una carrera a ver quien tiene la sala de catas más grande, el jardín más bonito, las vistas más privilegiadas, el vino más caro… todo muy bonito! Por lo tanto, nosotros no podíamos ser menos y decimos que nuestro winetrip por California sería a bordo de un flamante Mustang descapotable.
Todo lo contrario me sucedió en Sonoma. Solo visitamos dos bodegas, pero de las dos salí con una botella de vino bajo el brazo en cada una. (¡En Napa, ninguna!). En Sonoma encontré naturalidad, encontré enólogos curiosos, bodegueros comprometidos, encontré familias entrañables, encontré salas de cata que eran como el comedor de mi casa… encontré un paisaje más rural, más verde, más humilde, más de
Nuria & Carla, mis compañeras de aventura!

verdad. Y eso me gustó.
Tasting Room. Una cosa que tiene que saber el visitante es que en Napa Valley pocas veces se visita la bodega (cosa que no me parece mal). En Napa Valley lo que se lleva, o se llevaba, era la Tasting Room: una barra y una lista de precios para catar (generalmente una cata de 4-6 vinos está alrededor de 25 $). Pero alguna cosa está cambiando. Wayne Ryan, de Clos du val, lo advirtió “estamos pasando del tasting room a la tasting experience y por esto las barras del bar se están convirtiendo en sofisticadas terrazas chill out y salones majestuosos donde sentarse, relajarse y vivir una experiencia de lujo”
Amigo Palito… ¿dónde estás? Como ya he dicho, en Napa Valley se cata mucho, muchísimo… pero se cata a solas. Ni un triste palito, ni una triste patatilla. Nada, el vino se sirve con vino! Dicen que es porquè “no tienen licencia de bar y no pueden servir comida”. Por lo tanto, os aconsejo comprar una bolsa de cacahuetes sino queréis salir dando vueltas de las bodegas. Un sitio mítico para reponer fuerzas y comprar es Oakville Grocery. Y también, si estáis en la Zona, buscad rápido un In-N-Out y tomad una buena hamburguesa 100% USA. (podéis pedir la hamburguesa Animal Style, no está en la carta pero es de lo más ‘american style of life’ que puedes tomar).
No hay palitos… pero sí que se ofrecen (a precios desorbitados) algunas opciones de maridaje, pícnics de productos locales o selectas presentaciones. Una de las que más me sorprendieron fue en Le Wines donde podías hacer un curioso maridaje de vino con cupcakes. ¡Toma ya!
El llamado efecto WOW es lo que buscan la mayoría de bodegas en Napa Valley, una fantástica foto en instagram que arranque algun like y sobre todo muchos Wows! Un wow como el que hicimos en Clos du Val… después de una visita a su bodega (muy normalita, grande e industrial), en un rinconcito de la sala de barricas nos tenían preparado una mesita con un menú a nuestro nombre, luces, velitas y hasta una manta por si teníamos frío… literalmente WOW.
Aunque todo hace indicar que Napa Valley es un terreno repleto de prosperidad, también es cierto que los chicos no paran de tener desgracias. Al terremoto de 2014 le sucedieron varios incendios en 2017. Esto lo pudimos palpar de cerca en nuestra visita a la bodega Mayacamas, en medio del bosque, que quedó en parte perjudicada por estos terribles incendios. Aquí, la visita en buggy también nos brindó algún que otro WOW!
El vino en lata, sí! Existe! Lo había visto alguna vez en internet, en algún artículo de curiosidades del vino, pero nunca lo había catado. La visita al supermercado me lo confirmaba, el vino en lata existe y mira tú… tampoco está tan mal, eh!
El vino más hipster. Como ya hemos dicho, fuera de las grandes bodegas de Napa Valley, existen algunos proyectos muy interesantes. Si eres un modernillo tienes que viajar hasta Sebastopol y parar a tomar una copita en PAXwines. Es un ambiente industrial reconvertido a vivero 2.0. Todo muy hipster, todo muy pretty! ¡Y El vino, genial!
El vino con más variedades del mundo. Seguimos en Sonoma y llegamos a una bodega muy ‘de estar por casa’, Acorn Winery 😉 La propietaria nos sorprendre con un control de maduración en el viñedo y nos explica que en su finca tienen más de 50 variedades plantadas de todo el mundo. Muchas de ellas están plantadas mezcladas de manera que el coupaje se hace ya en el viñedo. “Como el buen caldo, que hierve todo junto”, dicen. Su máxima expresión de este coupaje es el Medley un vino que tanto huele a flores, a frutas, a especias, a pimiento o cualquier de los componentes que pueden tener sus más de 50 variedades!